La situación geopolítica y económica que estamos atravesando, así como los efectos del cambio climático, nos están llevando a experimentar en la actualidad un alto grado de incertidumbre sobre la posible evolución de las tendencias de los precios y la producción. Además, las perspectivas de la nueva campaña oleícola se han visto afectadas tanto por la falta de lluvias como por las altas temperaturas, especialmente en la parte central y occidental de la cuenca mediterránea.
A pesar de ello, existen dos factores que podrían mejorar el actual escenario frente a la tónica pesimista del mercado: la llegada de lluvias en septiembre y el rendimiento real de la cosecha, que pudiera acabar siendo mejor de lo esperado.
Un tercer factor que será clave en cuanto a la evolución de los precios es el nivel de consumo, que ha caído en los últimos meses. En este sentido, si el nivel de consumo se estabiliza en los valores anteriores a la pandemia, con una campaña media-baja en España, un enlace de campaña más alto que en la 21/22 y una producción global más alta en otros países, desde Deoleo valoramos que no hay razón para esperar una escasez de oferta.
De hecho, podríamos alcanzar un nivel de enlace de campaña similar al de esta campaña, al final de la 22/23.
En definitiva, la disponibilidad española (producción más enlace) podría ser inferior a la de la campaña 21/22 pero globalmente este porcentaje se verá parcialmente amortiguado por la mayor disponibilidad en otros países. De esta forma, podríamos encontrarnos en una situación similar a la de la campaña 20/21 en términos de disponibilidad, pero con unos niveles de consumo previstos mucho más bajos.
A nivel internacional, estimamos a Italia y Portugal con una producción inferior (alrededor del 20% aunque Italia tenga un enlace muy alto) y a Túnez y Turquía con una producción alrededor del 12% superior. En cambio, después de algunos años, las perspectivas de Grecia son finalmente abundantes (+70%). Cabe destacar que este país representa una cuenca de abastecimiento para la industria italiana (importadora neta) como alternativa parcial a la importación de granel de España y Portugal.
En cuanto a los posibles cambios de hábitos del consumidor en el complejo contexto actual, este tendrá que contener el gasto y en consecuencia, se producirá posiblemente una reducción de la demanda. En cierta medida, se verá beneficiada la marca de la distribución, pero no olvidemos que habrá un elevado trasvase de consumo fuera del hogar al consumo en el hogar, donde muchos consumidores apostarán por sus marcas de confianza.
Con respecto a la evolución de la subida de costes que se ha producido, somos optimistas con la evolución de los productos auxiliares de producción y de la cadena de suministro ya que de forma paulatina estamos observando una relajación en los costes de los mismos.
Fuente: Olimerca.com